En una empresa hay una gran cantidad de elementos imprescindibles, pero los trabajadores lo son más que ninguno. La plantilla de cualquier negocio es esencial para su eficaz funcionamiento, por lo que no debemos dejar a nuestros empleados en un segundo plano.
En ese sentido trabaja el marketing interno o endomarketing. Este se hace cargo de conocer a los empleados y se responsabiliza también de dar respuesta a sus necesidades y deseos. Su objetivo es estrechar las relaciones del empleador con su plantilla y, a su vez, garantizar el buen funcionamiento del personal y, por lo tanto, de nuestro negocio.
Entre estos elementos, los trabajadores serían los primeros. Ellos tienen que ser el centro de nuestra estrategia y debemos concebirlos como clientes internos, a los que les proponemos una idea de empresa.
Esta empresa sería otro de los ingredientes básicos. El concepto de la misma es lo que ¿venderíamos? a nuestra plantilla. En él debemos incluir tanto nuestra filosofía de negocio como las condiciones laborales, el clima de trabajo, la participación.
Para transmitir estas ideas necesitamos un plan de comunicación, que sería la tercera clave. Una comunicación que debemos plantear de arriba hacia abajo, para transmitir ideas, políticas de empresa? y al contrario, de abajo hacia arriba, para saber qué piensan nuestros empleados. Podemos recurrir a un servicio de hosting en el que alojemos nuestra página o, incluso, a una web mobile en la que sea posible la comunicación en ambos sentidos de forma rápida y sencilla.
Así, el último elemento que necesitamos es un equipo directivo. Este se encargaría de poner en marcha la comunicación y velaría por que el plan de marketing tuviera éxito.
Lo fundamental, como ya hemos señalado, es conocer a nuestros trabajadores, a las personas concretas que trabajan para nosotros, saber cuáles son sus necesidades, sus puntos fuertes, etc. A ello hay que unir el valor de nuestra marca, la cual debe definirse claramente. Solo de esta manera, nuestros empleados podrán hacer suyos los valores de nuestra empresa.
El espacio es también algo básico, pues al fin y al cabo es donde pasan la mayor parte del tiempo los trabajadores. Por este motivo, debemos escoger lugares cómodos y agradables, en los que apetezca estar. Los premios, bonificaciones y ofertas especiales pueden ser un extra que se añada a unas condiciones laborales óptimas y un salario justo. Son un incentivo que hace que el esfuerzo sea más llevadero al encontrar un reconocimiento posterior.
En definitiva, el marketing interno es una estrategia con la que podemos mejorar el funcionamiento de nuestra empresa, además de la integración y la comunicación con nuestros empleados. En este sentido, el desarrollo web personalizado de nuestro sitio puede ser una gran opción para comenzar una estrategia de comunicación interna.